Como hemos comentado en varias ocasiones en este blog, son muchos y variados los colaboradores, actores o interlocutores que con su actividad diaria colaboran en la construcción de la imagen o percepción de una marca. Los empleados que están en contacto directo con el público, vendedores, agencias comerciales, el equipo encargado del diseño de los productos y servicios, etc. Todos ellos crean una percepción de marca que puede ser consistente o no en función de la coherencia de los mensajes emitidos desde cada actividad.
Una de las claves para que el mensaje sea consistente a lo largo del tiempo es la coherencia. Que los mensajes sean homogéneos, que tanto el contenido como la forma de expresarlos respondan a un estilo visual y textual propio y reconocible. Por ello, una de las principales preocupaciones de los responsables de marca o marketing de toda marca es que todos los colaboradores que tienen la necesidad de desarrollar piezas de comunicación en sus diferentes ámbitos, lo hagan de manera consistente y coherente con las guidelines de marca.
¿Por qué la autoedición? Un caso práctico
Imaginemos el caso de una compañía hotelera que además de hoteles tiene agencias de viajes. Este podría ser un caso real donde el departamento de marketing diseña un estilo visual propio. Este pretende que sea aplicado por sus colaboradores de manera sistemática en todas las piezas de comunicación de la compañía.
No solo es muy necesario disponer de un estilo visual propio y coherente con la personalidad de marca que se desea transmitir. Además es muy importante que dicho estilo visual esté a disposición de todos aquellos que necesitan hacer comunicación en sus puntos de venta de forma fácil, rápida, homogénea y actualizada.
Surge aquí la necesidad de proporcionar templates, y que estos tengan autoedición para las agencias al tiempo que mantienen un layout común y on Brand. Y así es como nace el concepto de módulo de autoedición de un BrandCenter.
Dicha funcionalidad permite que los usuarios de un BrandCenter puedan crear piezas de comunicación. Lo podrán hacer utilizando las plantillas que los responsables de marketing o marca han creado y publicado en el mismo previamente.
Si se desea pueden proporcionarse dos tipos de plantillas. Las que requieren de aprobación por parte de un responsable y las que son de libre uso. También se pueden proporcionar plantillas para piezas digitales y para piezas para impresión.
Cuando un usuario selecciona una plantilla puede consultar sus características básicas como sus medidas, el idioma en que está disponible o los campos que son editables. Pueden modificarse, por ejemplo, la fotografía o el texto, pero la plantilla respetará la tipografía, los estilos y la posición que tiene definidos.
Una vez creada la pieza, si esta requiere validación podremos solicitarlo a través de un solo clic. La persona encargada de validar la pieza recibirá un e-mail. Si accede al apartado de Mis validaciones podrá ver la pieza que tiene pendiente de revisión. En esta misma pantalla cualquier usuario puede ver el estado de las piezas que ha creado, las que están en borrador, en revisión o aprobadas.
Una vez que recibe la aprobación, se podrá descargar el arte final de la misma.
Este proceso de autoedición se ha incorporado a la cadena gráfica de forma natural y proporciona al usuario una versatilidad y autonomía hasta ahora desconocidas ya que le permite resolver sus necesidades de creación de piezas de manera inmediata, con autonomía, pero siempre respetando los layouts proporcionados por el departamento adecuado.
De esta forma, el BrandCenter puede actuar incluso como brand manager, asegurando que todas las acciones, comunicaciones o procesos relacionados con la marca estén alineados con el plan estratégico y los valores previamente definidos. En definitiva, asegurando la coherencia, supervivencia y éxito de una marca.